Cómo ayudar a un ser querido con lipedema
Cómo ayudar a un ser querido con lipedema
Si alguien cercano a ti sufre de lipedema, es importante que sepas cómo ayudarlo. El lipedema es una enfermedad crónica que se caracteriza por la acumulación de grasa en las piernas, los muslos y los glúteos debido a una alteración del sistema linfático.
La lipedema puede ser dolorosa y dificultar el movimiento y el ejercicio, lo que puede afectar negativamente la calidad de vida de quienes la padecen. Sin embargo, hay medidas que puedes adoptar para apoyar y acompañar a tu ser querido durante su proceso de tratamiento para el lipedema.
Conoce los síntomas
Lo primero que debes hacer es informarte sobre el lipedema y sus síntomas. La mayoría de las personas con lipedema presentan piernas de aspecto inflamado con grasa acumulada de manera simétrica, dolor en las piernas y sensación de pesadez. Además, puede haber dificultad para caminar o realizar actividades físicas, lo que puede afectar a la movilidad y la calidad de vida.
Escucha y apoya emocionalmente
Es importante que estés disponible para escuchar y entender las preocupaciones emocionales de tu ser querido. La lipedema puede tener un gran impacto en la autoestima, la confianza y la imagen corporal de quien la padece. Por eso, es fundamental que brindes apoyo y comprensión emocional en todo momento.
Brinda asistencia práctica
Las personas con lipedema pueden tener dificultades para realizar tareas cotidianas que requieran moverse o levantar cosas pesadas. Ofrece tu ayuda para actividades como la compra de alimentos o la limpieza del hogar, por ejemplo. Estos pequeños gestos pueden marcar una gran diferencia en la calidad de vida de tu ser querido.
Estimula la actividad física
El ejercicio moderado puede ayudar a mejorar la movilidad y el bienestar general de tu ser querido con lipedema. Sin embargo, es importante que se realicen actividades que no causen dolor ni empeoren la condición. Puedes incentivar a tu ser querido a caminar, nadar o hacer ejercicios suaves como yoga o pilates siempre y cuando previamente hayan sido autorizados por un especialista.
Fomenta una alimentación saludable
Una alimentación balanceada y saludable puede contribuir a reducir la inflamación del tejido graso y mejorar la salud linfática. Puedes ayudar a tu ser querido a elegir alimentos nutritivos y limitar el consumo de grasas saturadas y azúcares. Un nutricionista puede ser de gran ayuda para elaborar un plan alimentario que sea adaptado según el caso.
Acompaña en el proceso de tratamiento
Tu presencia y apoyo son fundamentales durante todo el proceso de tratamiento del lipedema. Acompaña a tu ser querido a las consultas médicas, ayuda en la organización de citas médicas y, si es posible, participa en el cuidado postoperatorio. Si bien el único abordaje curativo es quirúrgico, la terapia física y linfática son una parte importante del proceso de tratamiento.